Como ser mas flexible

Como ser mas flexible

Cómo conseguir flexibilidad

¿No puedes agacharte y tocarte los dedos de los pies? Puede que pienses que la flexibilidad es algo con lo que se nace: o la tienes o no la tienes. Aunque tu nivel de flexibilidad está relacionado con la genética (no todos podemos ser contorsionistas), te sorprenderá saber que puedes desarrollar la flexibilidad del mismo modo que puedes desarrollar la fuerza, la resistencia o la velocidad.    Al igual que cualquier otra cosa, el desarrollo de la flexibilidad requiere práctica. Requiere tanta constancia como desarrollar los músculos o ponerse en forma para una maratón. Puede que no sea fácil, pero es definitivamente factible, y puedes empezar con estas sencillas maneras de ser más flexible.    Más información: Los mejores ejercicios abdominales para fortalecer el tronco

Realizar estiramientos estáticos puede ser el método más sencillo para mejorar la flexibilidad. Los estiramientos estáticos incluyen todos los ejercicios de flexibilidad que implican mantener un músculo en una posición estirada durante un tiempo considerable, normalmente unos 30 segundos. Esto le permite aislar y estirar profundamente un músculo. Empezar y terminar el día con estiramientos estáticos -sólo de 5 a 10 minutos- puede suponer una gran diferencia en la flexibilidad de los músculos en el día a día.    Algunos de los estiramientos estáticos con los que quizá ya esté familiarizado son:    Algunos estiramientos estáticos avanzados son:

Cómo estirarse para ser más flexible

Mantener la flexibilidad -que significa simplemente cuánto y con qué facilidad se pueden mover las articulaciones- puede ayudar a mejorar el equilibrio y la estabilidad, prevenir dolores y reducir el riesgo de lesiones como torceduras de tobillo y tirones musculares, según la doctora Carol Ewing Garber, profesora de ciencias del movimiento y kinesiología del Teachers College de la Universidad de Columbia en Nueva York.

Con los años, muchos de nosotros perdemos esa sensación de flexibilidad. A medida que envejecemos, tendemos a movernos menos, lo que acorta (y debilita) los músculos. Los músculos acortados hacen más difícil mover las articulaciones en toda su amplitud de movimiento.

Esto puede notarse especialmente por las mañanas, al cambiar de posición de sentado o tumbado a de pie, o al realizar movimientos como coger un vaso en una estantería alta o girar el cuello para mirar por encima del hombro. También puede experimentar un aumento de las lesiones menores, como tirones musculares, o sentirse menos estable en general.

Puede ser más flexible si se estira, realizando ejercicios suaves que ayuden a aflojar y alargar los músculos. Los músculos de la zona lumbar, del pecho y de las pantorrillas, así como los flexores de la cadera, son los que suelen necesitar más estiramientos.

Fisiología de la flexibilidad

No todos nacemos con la capacidad inherente de hacer fácilmente un split – y algunos de nosotros puede que nunca seamos capaces de hacer uno, por mucho que nos esforcemos en ello. Pero incluso si no eres flexible por naturaleza, puedes mejorar tu flexibilidad y aumentar tu rango de movimiento.

“Cada persona nace con una capacidad diferente de ser flexible”, explica Cathy Richards, fisióloga del ejercicio certificada por el American College of Sports Medicine (ACSM). “Me gusta decir que uno sabe lo flexible que es en segundo grado, en el recreo, cuando algunos niños pueden poner fácilmente las manos en el suelo mientras que otros no pueden ni siquiera acercarse a tocarse los dedos de los pies”.

Efectivamente, la flexibilidad tiene mucho que ver con aspectos como la edad y la genética, señala el Consejo Americano del Ejercicio (ACE). No obstante, los expertos coinciden en que todos tenemos cierto margen de maniobra en lo que respecta a la capacidad de estiramiento, y mejorar la flexibilidad puede reportar grandes beneficios.

Claro, ser capaz de contorsionarse en diferentes posiciones es un truco de fiesta genial, pero aumentar tu flexibilidad también tiene muchos beneficios en la vida real. Unos músculos sueltos y ágiles mejoran la amplitud de movimiento, lo que facilita la realización de tareas cotidianas, desde alcanzar objetos altos hasta agacharse para recoger una bolsa de la compra o sentarse cómodamente en el suelo mientras juegas con tu hijo.

Alta flexibilidad

Este artículo ha sido redactado por Monica Morris. Monica Morris es una entrenadora personal certificada por el ACE (American Council on Exercise) con sede en el área de la bahía de San Francisco. Con más de 15 años de experiencia en entrenamiento físico, Monica comenzó su propia práctica de entrenamiento físico y obtuvo su certificación ACE en 2017. Sus entrenamientos enfatizan los calentamientos y enfriamientos adecuados y las técnicas de estiramiento.

Lo que la mayoría de la gente llama “flexibilidad” incluye el rango de movimiento en sus articulaciones, así como la longitud de los ligamentos y tendones que rodean esas articulaciones. Si tu objetivo es ser flexible, puede que no sea suficiente con estirar. Pruebe el yoga o el pilates para mejorar su flexibilidad y preste atención a su salud general. Mantenerte nutrido y bien hidratado te ayudará a ser flexible[1].

Este artículo ha sido redactado por Monica Morris. Monica Morris es una entrenadora personal certificada por el ACE (American Council on Exercise) con sede en el área de la bahía de San Francisco. Con más de 15 años de experiencia en entrenamiento físico, Monica comenzó su propia práctica de entrenamiento físico y obtuvo su certificación ACE en 2017. Sus entrenamientos hacen hincapié en los calentamientos, enfriamientos y técnicas de estiramiento adecuados. Este artículo ha sido visto 3.465.912 veces.